domingo, 30 de octubre de 2011

Tarde de risotas varias

Tu novio es feo. Y tu también. Y te juntas con feos para parecer más guapa.

BANG BANG.




Jajajajajaja. Puta.

martes, 25 de octubre de 2011

Imaginame en Malasaña

Más de una vez he pensado en lo que me gustaría huir del barrio. No es que no me guste, es simplemente que no es mi estilo.

Yo quiero morir entre los tubos de escape de los coches de Madrid.

Edificios, semáforos, pitidos, vendedores ambulantes, gente con prisa, coches de policía, autobuses. Qué locura.
Pero eso quiero. Vivir en un sitio en el que me sienta pequeña. En el que vea que todo a mi alrededor es demasiado grande, demasiado inmenso como para preocuparme de mis tonterías. Soy una hormiguita en esta ciudad de locos. Y eso me gusta. Me gusta la ciudad de los locos.
Imagíname en Malasaña. Avisando a Carmen de que voy a la cafetería de abajo a subirle el desayuno. Y luego pasear por Fuencarral, comer en la Gran Vía, emborracharse en Chueca y volver arrastrándote a casa, entre pitidos y luces de colores.
Pero aún me queda tiempo para poder huir.
Creo que Carmen tiene razón. ¿A quién pretendemos engañar? Nuestras vidas no son tan interesantes, ni tan dramáticas, ni somos tan profundos. Egocéntricos. Eso es lo que somos todos. O por lo menos eso soy yo. Tampoco me parece justo meter a todo el mundo en el mismo saco. Cada uno que se juzgue a sí mismo.
Por eso anoche me planteé cerrar el blog. Pero bueno…no sé, quizás necesite ser una egocéntrica, una dramática de palo de vez en cuando (o casi todos los días).
Supongo que no hay nada de malo en eso. Salvo cuando se empieza a malinterpretar. Ese es el problema. El problema de las medias tintas. En Internet, como en la vida real, nadie habla claro, nadie es del todo sincero. Porque en el fondo todos tenemos miedo a que esas identidades ocultas que nos leen nos juzguen.
O por lo menos a mi me pasa.
En fin. Vaya chorrada de entrada. Hoy no he ido a clase. Me ha dado un bajón de tensión por la mañana. En serio, por qué soy tan cacas? Bah.

 Me ha dado ultimamente por los animales. Me gustaría ir al zoo a ver a los pandas. Me gustaría que alguien me cogiera un día y me dijera: Eh! Nos vamos al Zoo!


lunes, 24 de octubre de 2011

Mapache

Si fuera un animal, sería un mapache.
No sé, creo que tenemos cosas en común. Los mapaches son pequeños y tienen muchas rayas.

Por eso le dije a Adri que quería ser un mapache



sábado, 22 de octubre de 2011

Chicas que tienen la oportunidad de volar, y lo hacen.


Vengo del preestreno de PAN AM en Fuencarral. La verdad es que me ha gustado bastante. Me encanta la frase del chico que lo ha presentado: “Son chicas que tienen la oportunidad de volar…en todos los sentidos. Y lo hacen”. Ése me gustaría que fuera a partir de ahora el lema de mi vida.

Hoy he ido a comprar al Ahorramás (si ahora estuviera aquí Carmen nos haría una bonita promoción de todos sus productos. Es lo que tiene haber sido cajera de ahí XD). Me he ido desde mi casa con el típico carro de maruja de barrio. Al pasar por delante del escaparate del supermercado me he mirado un momento. Realmente tenía una pinta espantosa con un chándal desgastado, la chaqueta tres veces más grande que yo, el carro de maruja y la cara sin pintar. Por un momento me he visto dentro de 30 años, y me he preguntado si eso se convertiría en mi rutina diaria: Ir en chándal al mercado cargando con el carrito de la compra. Y he decidido que no, que yo quiero hacer más cosas. No quiero hacer la compra. 

También me he acordado de la canción de Sabina, la de “Y morirme contigo”, la parte que dice: “Y que vuelvas del mercado con ganas de llorar”…No sé, ha sido curioso.

Básicamente eso, mañana de tareas domésticas. Supongo que todo eso me ha ayudado mejor a disfrazarme de periodista para ir al preestreno de la serie, con camisa, zapatos  y americana. Querría luchar contra la imagen de maruja de barrio. Pero qué rara me he visto. El rollo ejecutiva agresiva me pega aún menos que el chándal. Sinceramente, espero llegar a ser una buena periodista y no tener que llevar americana para que la gente me tome en serio. Ese es el futuro que yo quiero. Ir a una redacción en chándal y que aún así todos digan: Tú lo vales, nena.

Últimamente me llamo a mí misma “nena”, supongo que me lo ha pegado mi padre de tanto usarlo. Él es único hombre en el mundo que consigue que la palabra “nena” me suene como algo bonito. Será por eso por lo que lo he empezado a usar.

En fin, al volver a casa mi madre me ha dicho que tenían mis nuevos análisis. Sigo con un poco de anemia. Pero por el amor de Dios, me empachan a comida y vitaminas y aún así tengo peores análisis que hace cuatro meses ¿cómo coño es posible? Bah, mierda de medicina, siento que me vacilan.

Poco más. Debo de aburrirme mucho, porque esta es la segunda entrada que escribo hoy. Y sin más dilación me voy a la cama. A medida que se ha acercado el fin de semana se me han ido las ganas de fiesta. En serio, empiezo a preocuparme, tengo menos marcha que mi abuela.

Ale, un beso. Dejo una foto de la serie que he visto hoy.


viernes, 21 de octubre de 2011

La teoría del canalizador

Ayer tuve clase de Yoga en Total Balance, y debo admitir que no me relajó en absoluto. Bueno, ¿y qué esperaba? No voy a quitarme toda la mierda de encima con un par de Saludos al Sol. Bah...

En una sola tarde ha muerto Gadafi y ETA ha dejado las armas. El mundo llora ilusionado. Y yo, como siempre, me pregunto cuanto tiempo queda para que las cosas vuelvan a joderse. Y la respuesta es siempre la misma: Poco, nena. Muy poco.

Cuando pìenso últimamente en estas cosas y en mi vena pesimista no puedo evitar acordarme de Ángeles y su teoría del canalizador. Según ella, soy un canalizador. Creo que flipé un poco, pero bueno, ella es la psicóloga, no yo. La verdad es que me hizo gracia, cuando utilizó la palabra "canalizador".  Lo primero que se me vino a la cabeza fue el Báculo de Victoria en Memorias de Idhún. Joder, hacía tiempo que no pensaba en ese libro.

La única diferencia entre el Báculo y yo es que yo solo canalizo tensión y miedo. Lo absorvo de todos los rincones de mi vida, de todas las personas que me rodean y de todas las cosas que veo a lo largo del día. Lo acumulo dentro, como hace el Báculo acumulando energía, y luego, sutilmente lo voy distribuyendo en pequeñas cantidades a mi alrededor. Vamos, en definitiva...soy un pequeño monstruito que hace que todo el mundo acabe mimetizándose conmigo y con mis mierdas.
Y yo pensando que era una víctima débil de este mundo cruel. Ja. Lo sabía, soy una niñata egocéntrica.

Supongo que a veces hay que replantearse las cosas.

Y me paro a pensar en porqué soy así. Porque llevo siendo un puñetero canalizador desde que tengo uso de razón. Y el problema es que se trata de algo que tengo ya tan interiorizado que forma parte de mí, es mi naturaleza. Y no puedo cuestionarme el porqué de algo tan íntimo.
Pero podemos buscar un principio. Y me pregunto si no seguiré siendo esa niña que tiembla en la cama asustada cada vez que sonaba el teléfono a la una de la mañana. Cuando un teléfono suene a la una de la mañana no esperes que pase algo bueno, porque no pasará.

Toda llamada venía acompañada de algo peor. Algo que se alargaba durante días y que cada vez se hacía más desagradable. Quizás por eso, soy incapaz de pensar que a veces pueden pasar cosas buenas, y simplemente me paso todo el día esquizofrénica perdida esperando a ver quién es la siguiente persona que me destroze por dentro.

Y eso lo dejo ver. Niña, eres un monstruito.

Y quieres cambiar...pero, ¿Cómo cambias algo que es tan tuyo? Y lo que es más importante, ¿Quién soy yo para intentar hacer que la gente cambie? Cualquier mínimo detalle me destroza por dentro. Pero soy yo la que tiene que dejar de ser tan débil, de temblar de miedo a la que siento un pequeño detalle negativo.

Pero no deja de ser un círculo vicioso. Yo no sé cómo cambiar, y la gente no puede cambiar. He ahí el problema.

Joder, vaya charleta. Creo que me voy a ir a correr un rato, a soltar adrenalina y a entrar en calor. El día se ha levanto frío. Es un puto asco. Llega el invierno y vuelve a pillarme desprotegida.

Me apetecía poner una foto. Algo mono, que me alegre el día.Y he pensado en un chibi. Los chibis siempre sacan mi parte más tierna:
 Echaba de menos mi vena friki, pero ultimamente está dandolo todo.










martes, 18 de octubre de 2011

Sueño

Oh, por el amor de Dios, Adri. Ese relato lo escribí hace dos años para la ECH (Sí, Lau, ese que nos mandó Tomás sobre el amor, pero lo tuve que descartar porque tarde recordé que nos había pedido un diálogo XD), y lo colgué porque me lo encontré el otro día en un pentdrive y me gustó cómo quedó XD Dejad de decir cosas raras por ahí, que me acosan por el Tuenti, coño  XD.


En fin, el domingo estuve viendo Mientras Duermes. Luis Tosar se sale, me encanta la mirada que tiene. De verdad me parece un pedazo de actor, me encanta. Además, tengo una extraña y preocupante debilidad por los psicópatas...Y sí, yo no habría tenido la amabilidad de Tosar, yo hubiera tirado a la niña por el balcón. Que se joda, por hijaputa.
Pues nada, que yo ya sé quién quiero que se lleve el Goya.

El abuelo cebolleta sigue con sus frases míticas, ayer sobre fajas. Mi profesor de estructuras cada día me recuerda más a Gándara, lo mismo son primos y todo.

Quiero salir de fiesta. A ver si llego al fin de semana con cuerpo para ello. Ale.

viernes, 14 de octubre de 2011

She drives at 90 by the Barbies and Kens.


Eres un complemento más. Ken tiene mascota, tiene dinero, tiene coche, un chalet en la  playa y un armario lleno de ropa. Y tiene a Barbie. Sin ella no sería un personaje tan envidiable. Barbie es sólo un objeto más para llamar la atención, para parecer completo. Aunque en el fondo no la necesita. Además, Barbie nunca ha sido Barbie. Y nunca lo será…

Las luces de Madrid son epilépticas.
 Es lo primero que piensa cuando el autobús arranca. Puedes estar en su esquina más desierta, pero antes o después te atacarán las luces epilépticas. Las de un coche, un semáforo, o incluso la luz de un mechero. Pero siempre te atacan.
El alcohol también hace que todo parezca más brillante, pero también más difuminado. Todo es más fuerte, más intenso, pero también está más entrelazado, es más confuso, más desquiciante. Como los pensamientos de su cabeza. A ellos también les afecta el alcohol.
Vuelve a mirar el cigarro que tiene entre las manos y observa su reflejo en el cristal del autobús. Solo ve ojeras y piel blanca. Se mira los pies. Comienzan a parecer pequeñas ristras de chorizo blanco a medida que se hinchan por culpa de los tacones. Se acuerda  del juego de los dedos que le hacían de pequeña: Éste fue a por leña, este la encendió, este puso la olla…Los suyos son diferentes. Sus diez dedos no cocinan. Éste se fue de fiesta, éste se emborrachó, éste oyó cosas que no le gustaron, éste se sintió engañado, éste no sabía que contestar cuando le preguntaban si todo iba bien, éste habló más de la cuenta, éste no habló lo suficiente,  éste quiso llorar, éste quiso fumar más que nunca, éste quiso destrozarse el vestido y mandarlo todo a la mierda.
Frunce el ceño, saca el mechero y se enciende el cigarro. Exhala la primera calada y suelta el humo con un suspiro y los ojos entrecerrados. Luego le mira.

-Cómo  puedes decir que me quieres si ni siquiera hay sitio para mí entre las cosas más importantes de tu vida...

Barbie tiene la piel dorada, los ojos azules y unas piernas de escándalo. Y una sonrisa envidiable. Inquebrantable. Nunca podría desaparecer de su carita de plástico. Tú no tienes nada de eso. Ni lo tendrás nunca. Tenlo siempre en cuenta.
Olvídate de ser Barbie, pequeña. Ni siquiera puedes permitirte eso.

jueves, 13 de octubre de 2011

Soy Bipolar, soy bipolar (8)

Hoy iba cantando un tío eso en la Renfe. La verdad es que era un tío grande, no sólo por estar cantando eso, sino por estar haciéndolo un jueves a las 8 de la mañana después de un día festivo. Estos tios raros son mi héroes.

En fin, que asco de noche. Creo que tengo que volver a recurrir a las drogas de farmacia para pegar la oreja un rato.
Ayer pretendía salir a correr por la tarde, es lo único que me hace irme a dormir con más ganas, pero me dio una bajada de tensión con 6 de alta y 4 de baja, vamos XD para que me diera algo. Así que me quedé en la camita con las mallas de correr mientras escuchaba música. Esto es lo que llamo yo un día festivo, a tope.


Pues nada, hoy tengo cita de nuevo con mi querido amigo Casas. Aver que me depara esta visita. Nada bueno supongo dado mis últimos análisis. Aunque hay cierto punto en el que creo que me podré llevar una sorpresa. Eso espero, necesito una dosis de positivismo, y a veces es el sitio por donde más me viene.


Ayer era fiesta y no fui a ver a Ángeles, y me hubiera gustado ir, porque tengo que aclararle una cosa: no es que tenga miedo al "descontrol", tengo miedo al "descontrol negativo".

Porque hay otro tipo de descontrol, y es el que más alegrías me da en la vida, con diferencia. Como éste:



Hay descontrol positivo, sin duda.

En fin, poco más. Con ganas de "descontrolarme positivamente". Un beso

lunes, 3 de octubre de 2011

Los chicos de mi vida


Hay gente que se cree muy profunda y muy compleja diciendo frases como “Tienes muchos conocidos, pero en el fondo, solo dos o tres amigos”, o bien “Los buenos amigos se cuentan con los dedos de una mano”. Mira, que os den. Yo los cuento con los dedos de las manos, los de los pies y todavía me faltan dedos.

Aquellos que dicen eso es porque o bien han tenido poquísima suerte (pobrecitos) o porque son personas tan jodidamente desagradables que deberían dar las gracias por poder levantar un puñetero dedito de sus manazas (Mensaje subliminal. Quien debe entenderlo lo entenderá eh?? BANG BANG!! XD en fin… tú me entiendes).

Si algo he tenido en esta vida son amigos. Y muy buenos. Aunque haya tenido profundas decepciones o algunas amistades se hayan erosionado con el tiempo, lo cierto es que es un sector de mi vida del que estoy muy contenta.

Porque todos son  increíbles. Y creo que se merecen un hueco en mi tablón. Hoy he decidido empezar con mis chicos, pero ya les llegará el turno a mis petardas, que son también muchas, y a la cual más grande.

De momento, quedaros con ellos. He decidido ordenarlos por orden alfabético, de una forma justa y objetiva XD:

Adri: ¿Qué decir de mi compañero de juergas? Pues que es mucho más que eso. Es esa persona que siempre está ahí para sacarte una sonrisa rebelde, para volverte loca y hacer que disfrutes la vida al máximo. Para que saltes y avances como el correcaminos, pierdas el control y te rías con ganas. Pero aún hay más. Es esa persona que siempre está dispuesta a defenderte, tanto del baboso de turno que pretende verte sin camiseta en el Moe´s como de todo aquel que te haya hecho verdadero daño en la vida. Es alguien capaz de transmitirte fortaleza, confianza, ganas de seguir adelante y de rebelarte contra todo. Gracias, en serio. Me haces fuerte. Que sepas que aquí tendrás siempre tu “putita francesa” (mote que me ha encasquetado por mi nuevo corte de pelo XD Aún sigo evaluando los pros y los contras del nombrecito XD).

Alberto: Super Batman. Ese chico genial, que parece callado, pero que dos minis de sangría le convierten en el alma de la fiesta. Compañero de bebercio, de confidencias y sobre todo, de grandiosas risas. Un chico difícil de encontrar, bueno con todo el mundo, amigo de sus amigos, lleno de dulzura y encanto. Chicas, no sabéis el bombón que os estáis perdiendo. Alguien increíble, sin lugar a dudas.

Alex: Mi Alex. Mi Alexis. Quizás una de las personas a las que más admiro y más quiero en el mundo. Chico listo y sensible, pero también pícaro e irónico. Alguien perfecto en todas sus múltiples facetas. Persona fiel, en la que confiar, siempre dispuesto a ayudarte y a sacarte esa sonrisa que te falta. Siempre me ha dado la fuerza y la confianza que me faltaban para emprender mis metas. Gracias. Confidente de mis miedos y sueños .Compañero de lectura, de escritura. Poeta como ninguno. Mi escritor favorito, y un amigo insuperable. Una persona, sin duda, irremplazable.

César: Mi niño punki. Cuantos años juntos y cuanto has cambiado en el camino.  Eras siempre, callado, pero muy majo. Me encantaba que a pesar de hablar poco, cuando lo hacía las matabas callando. El tiempo ha pasado y de compañero de clase se ha convertido en uno de mis mejores amigos. Ya no es tan callado, es más rebelde y muy divertido, pero sigue con ese toque tímido y dulce de vez en cuando, que le hace realmente adorable. Es capaz de aguantar durante horas y horas mis continuas rayadas de cabeza, y siempre tiene unas palabras de ánimo. Consigue siempre levantarme la moral y sacarme la sonrisa. Compañero de fiestas y pedos legendarios. Amigo para lo bueno y para lo malo. Una de las mejores personas con las que me he cruzado en la vida. Gracias por estar siempre a mi lado.

Code: Sabes? Cuando la gente me dice que tú y yo nos parecemos mucho me siento muy, pero que muy alagada. Pensar que pueda mínimamente parecerme a ti me sube la moral con creces. Code es una persona que me ha ayudado como nadie, con palabras y gestos de ánimo en mis peores momentos (sobre todo con palabras. Nunca podré agradecerte esa carta). Me ha dado fuerzas para seguir adelante, para valorarme y para creer más en mí misma. Está siempre ahí para escuchar mis problemas, para aconsejarme, para tenderme una mano y para hacerme sonreír. Compañero de risas y de lágrimas. Siempre dispuesto a seguirte, ya sea a una fiesta en el Moe´s o a Plaza de España a que le cuentes tus rayadas. Incluso  está dispuesto a venir a RivasMordor para que no pases el día sola. Has hecho por mí mucho más de lo que crees, y aún siento rabia cuando pienso en todo lo que has sufrido. Te mereces  ser feliz, y sé que lo serás. Y yo haré todo lo posible para ayudarte a que lo consigas, te lo juro. Porque tú me has ayudado a mí a volver a ser feliz, y te estaré siempre agradecida. Vales más que cualquiera que se te cruce en el camino. Que sepas que siempre me tendrás aquí. Eres único, no lo olvides. 

Coke: Mi compañero de frikismo. Echo en falta esos recreos sacando nuestra vena más friki. Eres un chico genial, te echo mucho de menos, y espero seguir viéndote de vez en cuando siempre que podamos.

Héctor: Si he de ser sincera, es la parte que más me ha costado escribir. No porque no sepa que decir, sino por todo lo contrario. Quiero decirte tanto, agradecerte tantas cosas que ponga lo que ponga me va a sonar hueco, vacío, noño o insuficiente. Pero aún así lo voy a intentar, porque tú más que nadie te mereces un trozo en una entrada como “Los chicos de mi vida”; porque tú eres el primero y el más importante. A tu lado me he dado cuenta de lo que es realmente querer a una persona. Cualquier momento es bueno si estoy a tu lado. Me has enseñado a abrirme, a expresarme, a ser más sincera con los demás y conmigo misma, y eso es algo que te agradeceré siempre. Me has apoyado, ayudado. Me has hecho reír y pasármelo en grande. Has confiado en mí y me has hecho confiar en ti. Has logrado poco a poco hacerte un hueco en mi yo más profundo y oculto, y te has convertido en algo más que una pareja; eres un amigo. Un amigo inigualable. Especial. Gracias por todos los buenos momentos que me has hecho vivir. Te quiero.

Iván: Lleva tantos años siendo mi mejor amigo, tantos años junto a mí, con tantos momentos inolvidables que difícilmente puedo elegir uno. Gracias por estar conmigo todo este tiempo, por aguantarme y divertirme, por hacerme la vida más entretenida. Por darme tu apoyo, tu cariño y tu protección.  Por darme consejos, por ser mi confidente, mi guardián de secretos, un amigo fiel insuperable. Que sepas que para mí te has convertido en algo más que un amigo, eres mi hermano, y eso es algo que no va a cambiar nunca, estoy segura.

Jie: ¿Qué decir de mi chino favorito? Pues que es un gran chico, listo, divertido y currante. Otro compañero friki con el que me he reído como nadie, que me ha picado, me ha hecho rabiar de broma, pero sobre todo me ha dado cariño y un hombro sobre el que llorar cuando lo necesitaba. Eres grande, tío. No cambies nunca.

Lobo: Un gran compañero de ostracismo XD Chico divertido como pocos. Siempre tiene las palabras necesarias para que te eches unas risas. Alguien que se gana tu cariño y tu aprecio a la primera.  Alguien que merece tu confianza y tu amistad, y que sin duda, tiene la mía. Eres un tío increíble, en serio.  

Vicen: No le veo tan a menudo como me gustaría, pero en estas últimas semanas sobre todo me he dado cuenta de la gran persona que es. Es un chico increíble, simpático y alucinante. Y con dos copas, el alma de la fiesta XD. Las veces que he estado a su lado me ha demostrado que es alguien fiel, bueno, que no te defraudará y que siempre está dispuesto a ayudarte. Espero que poco a poco te acerques más a nosotros y nos consideres amigos de verdad, porque nosotros ya te consideramos uno de los nuestros.

Victor: Mi hermano. Sangre de mi sangre. Me ha dado tanto alegrías como disgustos, pero mataría por él. Un buen hermano, eso no lo dudo. Por muchas broncas que hayamos tenido, me ha protegido, apoyado y consolado cuando de verdad lo he necesitado, y yo con el paso del tiempo me he ido dando cuenta de la gran persona que es. Te quiero, peque.


En fin, y fuera ya del tema comentar el día…Día curioso, sin parar. Universidad, médico (tengo cosas bajas en mi analítica y la reumatóloga me ha mandado pruebas de todo lo habido y por haber…Dios mío, yo sigo diciendo que es porque me hice los análisis estando con la regla, y si me sale algo de anemia y más cosas raras es porque (aunque quede muy gore-asqueroso-hardcore) sangro como un cerdo. (En fin, que desde pruebas de infecciones, hasta pruebas de VIH y lupus. Quieren traumarme).

Comida con mi madre en un asiático. Gran descubrimiento. Hace tiempo que no comía nada tan rico. Luego combifitness con Super Ce. Nos hemos echado unas risas aunque fuéramos algo descoordinadas. Y he vuelto a hacer uso de las pesas. Muahaha. Me encantan. Soy una jodida vigorexica . Bah, no, en serio. Pero mola hacerlasXD.

Pocas cosas me relajan tanto como hacer ejercicio, en serio. Va a ser verdad que potencia las hormonas (o lo que coño sea, eso lo sabrá mejor Laura House XD) de la felicidad.

En fin, poco más. Ahh, si. He conseguido mi primer aprobado en un test de la autoescuela. Soy feliz.

Ale, un besaco, que ya he dado demasiado el coñazo.